jueves, 5 de junio de 2008

SERES CURIOSOS

Se llama Nicola Abieri, tiene más de sesenta años, y hoy nos hemos puesto ha hablar por casualidad. Coincidimos a la puerta de una empresa, yo tenía una entrevista con uno de los responsables, el pedía en la acera. Pero lo hacía con dignidad, con porte. Llamaban la atención los modales con los que agradecía las aportaciones; de pronto reparó en que le observaba...me sonrió, "¿quiere colaborar a la mía vuelta al mondo?". Todavía no se porqué, le contesté en italiano y le di una pequeña aportación.
Lo siguiente, a veces pasan estas cosas, fue ponernos al día de nuestras experiencias. Lleva quince años viajando por el mundo. Se canso de ser uno más en un rincón y quiso serlo en todas partes...
Hoy sabe que tiene más de sesenta años y poco tiempo para seguir vagando, hace un mes alguien le contó que su tiempo tiene fecha de fin, un médico. Que debía volver a su casa.... no le importa, solo quiere seguir caminando, ese es su propósito.

Me invitó a un café con lo recaudado y siguió su camino...

1 comentario:

Tony dijo...

Pues es la excepción, porque una mayoría de los que piden suelen ser unos groseros y mal educados, no digamos ya si contestas con un no si te piden algo. Gran post y a mí me ha hecho reflexionar.